Consideraciones a la hora de comprar un irrigador dental
- Deposito: Existen irrigadores dentales portátiles de hasta 150 ml y son ideales para llevar a tus viajes o paseos. Existen por estáticos o los que se quedan permanente en nuestro baño y estos tienen hasta una capacidad de 1 litro de agua.
- Cantidad de boquillas: Ya sea un irrigador portátil o de mesa, la cantidad de boquillas en indispensable si cuentas con una familia numerosa y quieres compartirla y cuidar la salud bucal de todos, así que cuantas mas incluya mejor.
- Niveles de intensidad: Si cuenta con la mayor cantidad de niveles de intensidad mucho mejor, y es que esto te permitirá lograr mejor tus objetivos y adaptarse a la sensibilidad de tu boca. Hay irrigadores que cuentan hasta con masajeador de encías.
- Precio y garantía: Si bien es cierto entre más conocida sea la marca, mayor rapidez de respuesta obtendrás si tienes algún inconveniente o falla técnico con tu irrigador. Existen algunos que incluyen la garantía entre 2 a 5 años al igual que hay otros que ni siquiera la incluyen.
- Fuente de energía: Generalmente los portátiles funcionan con baterías o adaptadores para cargar con cable USB, los de mesa vienen con sus cables para enchufar a la corriente. Con los de batería considera también la cantidad y el tipo que utiliza y es que algunos utilizan batería ion litio y es posible que no sean tan fáciles de conseguir.
Como usar el irrigador dental
Primero a la hora de comprar uno deberías considerar los diferentes tipos de cánulas (tubos) ya que pueden variar dependiendo si el usuario cuenta con aparatos de ortodoncia.
Luego es importante que coloques el irrigador con un ángulo de 90 grados respecto a tus dientes y no encenderlo hasta que esté dentro de tu boca ya que podría haber derrames.
Estando dentro lo aplicas en las zonas deseadas por el tiempo que consideres necesario ( mayor de un minuto) y la intensidad de tu gusto.
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